jueves, 8 de septiembre de 2016

Angelino de Arriaga, dos y Barrantes, indulta en el cierra de Hualgayoc


Angelino de Arriaga en Hualgayoc
Magaly Zapata desde Hualgayoc, Cajamarca
Ayer se cumplió la segunda y última fecha de
feria Virgen del Carmen en la ciudad de Hualgayoc en Cajamarca con el triunfo de puerta grande del mexicano Angelino de Arriaga y el peruano Emilio Barrantes, dos orejas cortadas de aquel y el indulto de un buen pupilo de Paiján al cierre de la tarde-noche.
Angelino de Arriaga en Hualgayoc

Fue una grata sorpresa la torería, finura y capacidad del mexicano   Siguió en el quite por chicuelinas en los medios de buen sabor y con los palitroques alegró al público con un segundo par al violín muy aplaudido.  Lo más importante es que no permitió un solo capotazo y el mismo lo colocó a cuerpo limpio.  El toro fue noble pero justo de fuerzas y algo soso, Joaquín Angelino lo toreó con gusto, temple, siempre bien colocado, y gustándose en algunos momentos con la zocata y algún trincherazo.  Estoconazo, bien ejecutada la suerte y casi recibiéndolo, cayó en la pepa.  Dos orejas.   

Angelino de Arriaga, nuevo en el país, misma que desplegó nada más estirar su capote para recibir al primero de la tarde, de siete toros, no por la larga cambiada de rodillas sino por las innumerables verónicas que engarzó hasta los medios, mecidas y toreras.

Angelino de Arriaga en Hualgayoc
Angelino 
Torero fino es Angelino, con buena postura y gusto para torear encajado y cargando la suerte lo que aporta otra dimensión al muletazo, por eso nos animaba su labor con
 el 5º pero la poca fuerza que evidenció y la poca clase al embestir nos hicieron dudar.   Angelino saludó y quitó variado con el capote y quedó a merced del toro en banderillas al perder el pie, sin consecuencias, solo una dolencia en la rodilla derecha.  Con ella se trazó muletazos templados con empaque y gusto por ambos pitones.  Pinchó y entera en buen sitio.  Palmas.
El Yeta en Huagayoc
César Bazán “El Yeta” tuvo en el 2º de la fría tarde uno que apretaba hacia tablas y lo recibió con una larga cambiada y luego por verónicas sin llevárselo a los medios, acaso iba mejor por la derecha, pitón más largo, y ahí se acopló mejor el torero.  Pincha arriba y otra delantera, demora en doblar.  Con el sexto, un negro de bonitas hechuras que embistió con alegría en el capote y que recibió una buena vara tras ello el torero lo pasó por ambas manos sin encontrar acople por izquierda.
El otro peruano del cartel fue Emilio Barrantes.   Cajamarquino como “El Yeta” lo que resulta más allá de curioso, importante el apoyo que en la capital taurina del Perú como es la Región Cajamarca,  se da al torero local.   

Emilio Barrantes
Emilio Barrantes
Emilio Barrantes cortó una oreja a un toro que tuvo poca fuerza y fue algo soso y con el que se acopló mejor con la derecha, en larga faena.  Pinchazos y entera.  Pero su triunfo grande llegó con el que cerró feria, un buen toro de Paiján,  con trapío y serio que embistió bien por los dos pitones, empleándose y con galope, con fijeza y trasmisión.  Con él se le vio que tiene posibilidades,  lo trasteó por las dos manos y nos dejó la sensación que pudo exprimir y explotar aún más las bondades del toro, acaso en series más largas, acaso bajando más la mano, acaso conduciendo más largo la noble y fija embestida.  Se embarulló y emborronó el texto siguiente ante el insistente pedido de indulto que, dicho sea, el ganadero no correspondió con su pañuelo, sí lo hizo el presidente y sus seguidores disfrutaron con el triunfo de su torero.

Cristóbal Pardo
Nuestro relato concluye con la reseña de lo hecho por el colombiano Cristóbal Pardo, quien toreó un  toro cada tarde en 4º lugar.   Esta vez le correspondió  un jabonero que puso emoción en su salida y lo recibió con buenas verónicas,  que metió bien la cabeza por los dos pitones y con transmisión. Sin embargo, tras el segundo tercio se apagó, le faltó fondo. Echó la muleta retrasada y a su paso lo condujo con suavidad y a media altura, acortó distancias y siempre con tiento lo pasó,   sus muletazos fueron suaves y lentos, pero la poca fuerza del toro lo condicionó al embestir.  Pincha y desprendida.  Oreja.
Concluyó en la noche y con los Apus testimoniando la ceremonia de premiación del serial en honor a la Virgen del Carmen, cada premiado recibió el Trofeo Caxagas, una empresa regional que siempre apoya la tradición taurina en los pueblos del Perú.    
El trofeo Caxagas al mejor banderillero fue para Ronald Sánchez; el trofeo Caxagas para la mejor faena fue para Emilio Barrantes  (y creo que en franca competencia con la del mexicano Angelino de Arriaga), mejor ganadería la de Paiján, recibiendo el trofeo el ganadero don Aníbal Vásquez (se lidiaron 14 toros de la casa Paiján de los cuales acaso 4 o 5, carecieron de fortaleza o se vinieron a menos pero sin complicaciones de genio ni malas ideas lo que es una ventaja para los actuantes. El triunfador del serial fue  el español Emilio Serna.    
Era la primera vez que concurríamos a este coso andino y encontramos gran esfuerzo y colaboración de los aficionados para su organización, con toros donados por notables para que el pueblo disfrute del espectáculo que más le gusta.

FICHA.  Plaza de toros La Carmelitana en Hualgayoc, Cajamarca.  7 de agosto del 2016.  Se lidiaron 7 toros de Paiján, bien presentados,  buenos en líneas generales, destacando 2º 3º y 6º que fue indultado.  Angelino de Arriaga (Mex), dos orejas y palmas. César Bazán “El Yeta”, ovación y ovación.  Emilio Barrantes, oreja y dos orejas simbólicas.  Cristóbal Pardo (Col), oreja.  Incidencias:  El mexicano Angelino de Arriaga y el peruano Emilio Barrantes hicieron el paseíllo desmonterados.  Reapareció en esta feria el subalterno Santiago Arrieta "El Santi" recuperado de una cornada.